El nutricionista es el único que puede indicar qué comer y qué evitar para bajar de peso sanamente. El verano es la temporada de las dietas extremas, todo por el afán de querer bajar de peso. Quienes las ponen más en práctica son las jóvenes, pero esta situación puede traerles problemas de salud.
Las dietas rigurosas producen una deficiencia de hierro en la sangre, lo cual afecta la producción de glóbulos rojos y el transporte de oxígeno por el cuerpo. Esto trae como consecuencia el desarrollo de la anemia, uno de los problemas nutricionales más comunes en el mundo.
Pero el grupo en el que esta condición predomina es el de los adolescentes. Al respecto, Oscar Barrenechea, director médico de Marketing Farma de Química Suiza, dice que lo que más llama la atención es que la mayoría de los casos de anemia adolescente se presentan en la época de verano.
"La preocupación por el peso lleva a muchos jóvenes a someterse a dietas desequilibradas y de escaso valor nutritivo sin ningún tipo de supervisión, lo que puede derivar en la aparición de anemia y otros problemas de salud", advierte el doctor.
Como los adolescentes son los más vulnerables a la anemia, para evitarla, el médico recomienda consumir alimentos con alto contenido de hierro, como espinaca, alcachofa, brócoli, lentejas, carne de res, pollo, pescado, higado y riñon.
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