Cuando llega el verano, los que tienen sobrepeso son especialmente conscientes del hecho y más cuando se está en traje de baño. Hay una dieta que es especialmente agradable para seguir en la temporada de verano, y es la Dieta Mediterránea.
La razón de que la dieta mediterránea se adapta bien en el verano es que la mayoría de los alimentos a los que representa son de temporada o se exportan rápidamente. Un montón de verduras frescas, frutas, frijoles, nueces y semillas. Además de una buena dosis de aceite de oliva virgen extra favorita, y la temporada de pesca mantiene el marisco procedente.
Además, la dieta mediterránea se centra en alimentos de alta calidad, en cantidades limitadas, con productos cultivados localmente es la mejor opción de todas. Y por supuesto, ¿qué mejor momento para golpear el mercado del agricultor que cargar una cesta de productos frescos de la temporada de verano?
Verano y la dieta mediterránea también van bien juntos, porque las recetas de los platos mediterráneos son más ligeros y son más fáciles de digerir. Un guiso espeso o asado graso es reconfortante en el invierno, cuando su cuerpo, naturalmente, quiere guardar para quemar calorías para combatir el frío. Sin embargo, durante el verano, el calor y la humedad se combinan para hacer comidas pesadas poco atractiva, mientras que una ensalada con aceite de oliva extra virgen y un chorrito de jugo de limón suena como una gran idea.
Como siempre, la dieta mediterránea se hace con la intención de que se reduzca en las porciones que consume a la vez. Obtenga platos y tazones más pequeños, y se centran en no perder nunca una comida, pero siempre comer una porción razonable. Recuerde que la dieta mediterránea no es una dieta "accidente", sino un estilo de vida estable sensato que usted debe tener un medio de compromiso a largo plazo para que funcione.
