En esta etapa el desarrollador web llega a un acuerdo con el cliente o usuario para los servicios web solicitados. Se establece un precio del mismo así como el diseño del sitio web. Se recomienda un adelanto del 30 al 50% de un anticipo mismo para realizar el servicio web. Toda vez que, no hay compromiso por ninguna de las partes. Es muy importante hacer el contrato especificando todo lo que se va hacer en el sitio web. Debe nombrarse un interventor por parte del cliente, que es la persona con quien nos vamos a entender durante todo el proyecto. En lo posible una sola persona. Luego organizaremos la información por categoría. La información que nos da el cliente debe recibirse por medios informáticos CD o Memoria USB. Una vez recibida la información debemos hacer un mapa del sitio para que los contenidos estén bien organizados. La información recibida debe estar completa ya que, de lo contrario, tendríamos que hacer cambios en el mismo y, por ende el tiempo de trabajo se duplica y el cliente tendría que pagar de más por cada cambio que se realice. Esto debe pactarse dentro del contrato.
Por otra parte, y como colorario de lo anterior, se realizará una propuesta gráfica para mostrárselo al cliente, y éste pueda darse una idea de cómo quedará su sitio web. Se debe pedirle al cliente por lo menos tres (03) referencia de página web para conocer qué es lo que el cliente quiere en colores, diseño, formas. Estas propuestas graficas solo deben hacerse dos propuestas gráficas.
El cliente debe aprobar la propuesta gráfica y hacerle saber que cada cambio genera un pago adicional al mismo.