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La erupción que ha sufrido nuevamente un volcán de Islandia, está alarmando a las empresas que se dedican al sector turístico, esperan que no traiga las mismas consecuencias del año pasado cuando erupcionó otro volcán, ya que la caida de ventas de billetes y cancelación de reservas, tanto en hoteles de lujo como en hoteles baratos fue masiva.
No obstante, algunas empresas aéreas, empezando por la aerolínea más importante de este país: Icelandair, han impuesto tranquilidad ante la nube de cenizas generada por la erupción reciente.
Esta compañía afirma que la nube de cenizas ha sido proyectada a mayor altura que la del año pasado, con lo que creen que podrán reanudar sus vuelos lo más pronto posible.
La aerolínea asume que el número de afectados en este caso podrían alcanzar los 6.000, un número mucho menor que los del año pasado. De todas formas, esto no es algo que logre tranquilizar del todo a los turistas que han perdido sus vuelos.
En lo que coinciden los expertos, es que el impacto que tendrá la nube de cenizas en esta ocasión, no tendrá nada que ver con la erupción del pasado año, que paralizó Europa, en lo que a este sector se refiere.
