Como probablemente hayáis escuchado en más de una ocasión el proceso de elaboración de un buen jamón ibérico es lento, delicado y costoso.
Hay una gran cantidad de empresas que se dedican a la venta de jamones ibéricos, pero muchas de ellas ni siquiera los producen, por lo que la calidad, textura y sabor del jamón se les escapa de las manos.
En El Coto Ramos controlamos todo el proceso de producción de nuestros productos desde el nacimiento y la crianza del cerdo hasta la venta de nuestros reputados jamones ibéricos.
Todo empieza en la finca donde nacen y crecen los cerdos, éstos son controlados desde antes de su nacimiento, como es obvio, la delicada selección de los padres y la alimentación de éstos también es fundamental y permite garantizar al consumidor la calidad de los embutidos y jamones ibéricos.
Los cerdos ibéricos crecen en libertad y se alimentan para adquirir masa muscular bajo la atenta supervisión de los veterinarios.
De ahí pasan a las dehesas extremeñas y andaluzas donde completan su crecimiento a base de hierbas, bellotas y recebo.
Las bellotas son una de las claves del especial sabor de jamones y embutidos, algo muy valorado a la hora de comprar jamón ibérico de Guijuelo, por ejemplo.
Una vez tienen en peso y tamaño adecuado pasan al matadero y posteriormente a la sala de despieze, donde cada pieza es seleccionada y preparada dependiendo de su destino final, consumo en fresco, curado, etc.
Y como una imagen vale más que mil palabras aquí os dejamos el vídeo de la crianza del cerdo ibérico en la finca y su llegada al matadero en Guijuelo.
http://www.youtube.com/watch?v=n8kBgVI-_cU
En otra ocasión detallaremos el producción del jamón ibérico en sí, desde que se despieza hasta que finalmente llega a la tienda en la que podemos comprar jamón ibérico.