Muchas personas piensan que hay que montar los neumáticos de invierno en el eje motor del coche. No obstante, si montamos los neumáticos de invierno en el eje motor podemos perder el control del vehículo con facilidad.
Dos neumáticos de invierno en el eje motor no son suficiente para circular con seguridad en invierno. Al montar dos neumáticos podemos facilitar la motricidad al arranque pero los ejes delantero y trasero de nuestro coche no estarán en equilibrio. El mismo problema se presenta en todos los tipos de transmisión: tracción, propulsión o transmisión integral, sea cuál sea el tipo de transmisión del vehículo, montar sólo dos neumáticos de invierno no es seguro.
En un vehículo a tracción si los neumáticos de invierno se montan en el eje delantero, el trasero estará desequilibrado y podemos sufrir un trompo.
Igualmente, en un vehículo a propulsión, si montamos los neumáticos de invierno en el eje trasero provocaremos un desequilibrio en el eje delantero y correremos el riesgo de salirnos de la carretera en las curvas.
Así pues, la mejor manera de asegurarnos de tener un buen comportamiento del vehículo en invierno es montar cuatro neumáticos de invierno.
Un error común es pensar que los neumáticos de invierno sólo sirven para la nieve, no hay que olvidar que los neumáticos de invierno son eficaces a temperaturas inferiores a 7 ºC. Por lo tanto, su uso es aconsejable en zonas de montaña o en zonas en las que la temperatura media en invierno sea de menos de 7 ºC.