A mediados de 2010 entro en vigor la reforma de la ley de tráfico que busca agilizar los procedimientos a los buenos conductores y ponérselo difícil a los infractores reincidentes. Esta ley es la consecuencia de los cambios que se han ido produciendo tanto en la legislación sobre el tráfico como en la sociedad española.
Recordaremos como hace tres años, en 2006, se puso también en marcha el sistema del carné por puntos que fue también un cambio importante en cuanto a la legislación y que sirvió para mejorar notablemente la seguridad vial en las carreteras españolas.
La nueva ley establece 3 clases de sanciones que van desde las leves (cuya cuantía irá de 0 a100 euros), las graves (200 euros) y las muy graves (500 euros). De esta manera, la ley simplifica por tanto las clases de sanciones dividiéndolas en esos tres modelos y asignando unas cuantías económicas bien definidas de manera que el conductor cuando comete la infracción conoce la multa económica y pérdida de puntos que corresponde. La nueva legislación también estable un descuento en el pago de las multas antes de los 20 días, en los cuales se reduce del 70 al 50% la dinero a pagar. La ley también incorpora como novedad la Dirección Electrónica Vial, en la que el conductor voluntariamente puede darse de alta, para poder recibir en su mail, o por mensaje en su móvil a través de SMS una notificación que le informa de que tiene una multa: Esto hace mas fácil al usuario saber cuando tiene una multa a pagar y agiliza los tramites si quiere recurrir una multa.