¿No os ha pasado alguna vez que, estando de viaje en el más inhóspito lugar, os encontráis con alguien conocido?
Es muy posible que sí; la gente lo atribuye a la suerte o al azar… sin embargo en mi opinión esto se debe a otro tipo de factores:
Por un lado, es muy posible que esa persona que te has encontrado en ese inesperado rincón del mundo haya ido allí por un motivo similar al tuyo; esto es, venís del mismo sitio y es muy probable que frecuentéis algún lugar común; a pesar de los diferentes modelos de vida que lleva la gente, y de sus rutinas o aficiones y costumbres, es posible que los dos coincidáis en algún aspecto de la vital que os haya movido hacia un mismo destino en común. Es muy posible que visitéis las mismas páginas web a la hora de encontrar Billetes avión baratos , y que las preferencias a la hora de encontrar un aeropuerto para establecer la salida del viaje sean muy similares, sino bien, las mismas.
También es muy probable (y mas dadas estas fechas de crisis) que los dos hayáis elegido alguna oferta parecida de Vuelos económicos lo que explicaría que las fechas del viaje pudiesen coincidir también en función de la oferta.
Es sabido que en muchos casos resulta que esa persona que te encontraste en el mismo bar en aquel centro comercial de Varsovia, ¡venía en el mismo avión que tú y tan siquiera os cruzasteis en la cola de embarque! O que una de esas cuarenta personas que se reía mientras el amable y educado responsable de los controles de seguridad se “quedaba (literalmente) contigo” por pitarte el escáner unas 100 veces, era “fulanito” que se reía como uno más sin tan siquiera conocer la identidad del afortunado y espontáneo bufón de turno.
Suerte o azar, no hay nada como encontrase con “uno como tú” en el último bar de la noche perdido en medio de… pues eso… la misma noche.
