Tener un coche implica asumir una serie de responsabilidades, entre ellas su mantenimiento. Aunque los vehículos actuales son mucho más fiables que los de hace unas décadas, siguen teniendo componentes que se desgastan, se rompen o fallan con el tiempo. Algunas partes del coche son más propensas a averiarse que otras, ya sea por el uso, por la exposición a condiciones climáticas adversas o simplemente por el paso de los años.
En este artículo vamos a repasar cuáles son las partes del coche que más se averían, por qué ocurre esto y cómo podemos prevenirlo. Además, veremos cómo estos fallos pueden afectar a la hora de pasar la ITV y qué hacer para llegar preparados a la inspección.
Importancia de conocer las averías más comunesConocer las partes del coche que más fallan tiene varias ventajas:
-
Nos permite estar atentos a los primeros síntomas.
-
Podemos anticiparnos con un mantenimiento preventivo.
-
Evitamos averías costosas a largo plazo.
-
Aumentamos la seguridad y reducimos riesgos en la carretera.
-
Mejoramos las posibilidades de pasar la ITV a la primera.
Los coches actuales combinan mecánica tradicional con muchos elementos electrónicos. Esta combinación ha dado lugar a una nueva generación de fallos, donde tanto lo electrónico como lo mecánico pueden fallar.
A continuación, detallamos las partes más vulnerables.
1. BateríaLa batería es uno de los componentes que más comúnmente falla, sobre todo en épocas de frío o cuando el coche permanece parado durante mucho tiempo.
Motivos de fallo:
-
Desgaste natural (vida útil media de 4 a 5 años).
-
Falta de uso del vehículo.
-
Mal estado del alternador.
-
Cortocircuitos o fugas eléctricas.
Síntoma s:
-
El coche no arranca.
-
Luces tenues o parpadeantes.
-
Fallos electrónicos intermitentes.
Prevención:
-
Revisar su estado en cada revisión.
-
No dejar el coche mucho tiempo parado sin arrancar.
-
Sustituirla antes de que falle completamente.
Aunque no solemos considerarlos una avería mecánica, los neumáticos desgastados o dañados son uno de los principales motivos de rechazo en la ITV.
Motivos de fallo:
-
Desgaste por uso.
-
Presión inadecuada.
-
Golpes o bordillazos.
-
Desalineaci&oac ute;n o mala suspensión.
Síntoma s:
-
Desgaste irregular.
-
Vibraciones al conducir.
-
Menor agarre o estabilidad.
Prevención:
-
Revisar presión y estado de dibujo regularmente.
-
Rotar neumáticos cada ciertos kilómetros.
-
Cambiarlo s antes de llegar al límite legal (1,6 mm).
Los frenos son un componente esencial para la seguridad. Las pastillas y discos de freno se van desgastando con el uso, y su mal estado es una causa frecuente de averías y rechazos en la ITV.
Motivos de fallo:
-
Uso intensivo.
-
Conducción agresiva.
-
No cambiar las pastillas a tiempo.
-
Líquido de frenos contaminado o bajo.
Síntomas:
-
Ruidos al frenar.
-
Vibración en el pedal.
-
Mayor distancia de frenado.
-
Pedal esponjoso.
Prevención:
-
Revisar frenos cada 20.000 a 30.000 km.
-
Sustituir el líquido de frenos cada 2 años.
-
Acudir al taller ante cualquier ruido anómalo.
El embrague es otra de las partes que más se avería, especialmente en coches con muchos kilómetros o en aquellos usados en ciudad.
Motivos de fallo:
-
Conducción inadecuada (pisar el embrague innecesariamente).
-
Arranques bruscos.
-
Mucho tráfico urbano.
-
Tirar de remolques o sobrecarga.
Síntomas:
- r
-
Pedal duro o muy blando.
-
Dificultad para cambiar de marcha.
-
El motor sube de revoluciones pero el coche no avanza (embrague patina).
Prevención:
-
Usar correctamente el embrague.
-
No mantener el pie en el pedal innecesariamente.
-
Revisar el kit completo cada 100.000 a 150.000 km.
El sistema de escape, especialmente el catalizador y el filtro de partículas, sufre mucho con el paso del tiempo y las condiciones de conducción.
Motivos de fallo:
-
Recorridos cortos frecuentes.
-
Mal funcionamiento del motor.
-
Combustión incompleta.
-
Fallo en la válvula EGR.
Síntomas:
-
n
Ruidos extraños.
-
Humo excesivo o de color anómalo.
-
Luz de avería motor encendida.
-
Olor a gases en el interior.
Prevención:
- r
-
Conducir ocasionalmente en trayectos largos para limpiar el sistema.
-
Usar combustible de calidad.
-
Revisar emisiones regularmente.
Un motivo muy frecuente de rechazo en la ITV es el fallo en el sistema de luces: bombillas fundidas, altura incorrecta o mal funcionamiento de intermitentes y antiniebla.
Motivos de fallo:
-
Bombillas de mala calidad.
-
Fallo en conexiones o fusibles.
-
Uso intensivo sin revisión.
Síntomas:
-
Bombillas que se funden con frecuencia.
-
Avisos en el panel de instrumentos.
-
Luz parpadeante o débil.
Prevención:
r-
Comprobar todas las luces antes de cada inspección.
-
Sustituir por bombillas homologadas.
-
Revisar fusibles y relés si hay fallos recurrentes.
Los amortiguadores se desgastan de forma progresiva, lo que puede afectar no solo a la comodidad, sino también a la estabilidad y seguridad del coche.
Motivos de fallo:
-
Conducción por carreteras en mal estado.
-
Carga excesiva frecuente.
-
Amortiguadores sin mantenimiento.
Síntomas:
-
Inestabilidad en curvas.
-
Rebote excesivo.
-
Desgaste irregular en neumáticos.
-
Ruido metálico al pasar por baches.
Prevención:
-
n
-
Revisar amortiguadores cada 60.000 km.
-
Sustituir en pares (ambos lados del eje).
-
No cargar en exceso el vehículo.
Los coches modernos tienen decenas de sensores: ABS, ESP, presión de neumáticos, oxígeno, temperatura, entre otros. Cualquier fallo puede encender testigos de avería y provocar que el coche no pase la ITV.
Motivos de fallo:
-
Humedad o suciedad.
-
Desgaste por temperatura.
-
Conectores dañados.
-
Fallos de software.
Síntomas:
-
n
-
Luces de aviso encendidas en el cuadro.
-
Comportamiento errático del motor.
-
Fallo de funciones automáticas (frenada, luces, sensores de aparcamiento).
Prevención:
-
Revisar el sistema electrónico en cada revisión.
-
No ignorar testigos del cuadro.
-
Realizar diagnosis cuando haya errores intermitentes.
Muchas de las averías descritas anteriormente son causas directas de rechazo en la ITV. Los motivos más habituales por los que un coche no pasa la inspección son:
-
Defectos graves en frenos o suspensión.
-
Luces o intermitentes en mal estado.
-
Exceso de emisiones.
-
Desgaste excesivo en neumáticos.
-
Testigos de avería motor encendidos.
Por eso, es fundamental revisar todos estos puntos antes de acudir a la cita. Una revisión previa, aunque tenga un coste, puede evitar un rechazo y posteriores molestias.
Conclusión: Mantén tu coche a punto para evitar sorpresasAunque ningún coche está libre de averías, conocer los componentes que más fallan y estar atentos a los primeros síntomas nos permitirá prevenir problemas mayores. Revisar frenos, luces, neumáticos, batería y sistema de escape de forma periódica es una forma eficaz de evitar imprevistos y de garantizar que nuestro vehículo esté siempre listo para pasar la ITV sin complicaciones.
Y si estás en la provincia de Valencia y te toca pasar la inspección, puedes solicitar tu cita fácilmente en ITV Massalfassar. Acudir con antelación, con el coche revisado y en buen estado, hará que la inspección sea un simple trámite más en tu agenda.