Ahora es el Banco Mundial el que se hace eco de las instituciones financieras mundiales: el mundo ya está en crisis económica, y ha iniciado en los países desarrollados debido a la mala administración de las deudas. Esto ocasionará más desconfianza en los consumidores.
Y es que, como hemos apuntado, la crisis financiera actual se originó en Europa; lo de Grecia vino a ponerle los clavos al ataúd. Una consecuencia palpable de esta situación la estamos viendo en las oscilaciones que han presentado las bolsas de valores de los países latinoamericanos. Esto se debe a que las inversiones han disminuido en el último mes.
Robert Zoellick, el jefe del Banco Mundial, se mostró preocupado en la reunión que tuvieron hace poco en la ciudad de Washington; principalmente, por la disminución en las inversiones de los países ricos hacia los pobres.
Si los países ricos están en crisis, dejarán de enviarles dinero a los pobres, ocasionando inestabilidad en las economías subdesarrolladas. Esto ocasionará que los consumidores de estos países caigan en desconfianza, logrando disminuir la demanda a un grado alarmante.
Así es que la economía mundial ahora está en manos de unos cuantos países privilegiados (léase: la Unión Europea, Japón y Estados Unidos). Ellos son los que deberán tomar una decisión inteligente para que el mundo entero se salve de una recesión.
Todo parece indicar que los países europeos ya están tomando cartas en el asunto, tratando de ayudar a la economía griega; sin embargo, los bancos de aquel continente son los que saldrían más perjudicados, ya que no podrían sostener más deuda.
Los ojos del mundo financiero están puestos en Grecia y mucho se espera de los países ricos que puedan apoyar con un subsidio. Y no es para poco: ¡lo que suceda en aquel país afectará directamente a nuestros bolsillos!
Quieres mas informacion actualizada a diario entra a VidaEconomica.Org