Un día caminando por la calle en una de esas veces que salgo a recorrer la y ver lo q pasa. Me detuve a ver un embotellamiento de tráfico en unas de las calles más concurridas de mi querido Chiclayo. De pronto llego un señor de unos 37 años a eso de las 7:50am estaba desesperado por pasar casi ocasiona un accidente en repetidas oportunidades me pareció que llegaba tarde al trabajo, en la otra vía había un señor con el cabello blanco y unos niños que al parecer llegaban tarde a la escuela. Los dos estaban desesperados por ganar el pase, al cambio de la luz encendieron la maquina ni se vieron a las caras y empezaron a gritar entre ambos más la persona q llegaba tarde al trabajo, de repente saco una foto de la guantera lo que habrá sido no lo se le dio un beso y sonrió y le cedió el paso a la persona mayor que automáticamente la cambio el ánimo de estar enojado sonrió y le dijo gracias. Y me di cuenta que el estado de ánimo o las buenas acciones llaman a las buenas acciones y se contagian. y me di con la sorpresa que no todo es como se dice que no todo es malo, que tambien salen actos buenos pero los medios de comunicacion no los publican por que no llaman la atencion.
Eduardo Sanchez Garay
