Situado en el centro de Europa, la República Checa es un país pequeño sin salida al mar. Limita con Alemania al suroeste, al sur de Austria, Polonia al norte y Eslovaquia al sureste. República Checa es la tierra del verdadero espíritu, donde las tradiciones han sobrevivido a través de los tiempos, donde una gran cantidad de castillos y palacios visitantes llenan de asombro y admiración a todos sus visitantes.
Praga, la capital checa, es una de las ciudades más bellas del mundo, con una atmósfera inimitable creada por su milenio de historia. Numerosos museos, galerías y otros sitios turísticos abundan en diversas regiones de República Checa.
República Checa es conocida por su alto nivel de atención médica y sus bajos costos en comparación con otros países. Además, este maravilloso país cuenta con personal altamente cualificado y prestigiosas instalaciones de spa. Por ello, República Checa se convierte en un sitio perfecto para realizar turismo médico: sus cirujanos son excelentes profesionales y las instalaciones de los hospitales del país son muy modernas y avanzadas.
Los balnearios checos están también al alcance de la mano de aquellos que se someten a operaciones en el país. República Checa es famosa por vincular la atención pre y post-operatoria para una variedad de operaciones ya sean estéticas o médicas, ideal para todos aquellos visitantes que llegan a el país para realizar turismo médico.
Si buscas un sitio hermoso donde pasar unas minis vacaciones y a su vez realizarte una cirugía estética para mejorar alguna parte de tu cuerpo que no te agrade, no dudes en realizar turismo médico en República Checa.