Después del partido de Milán, donde el Barça cayó por 2 a 0, los jugadores que se atrevieron a pasar por zona mixta aseguraron creer en la remontada. Frases como "somos el Barça y esto lo vamos a sacar adelante" o incluso "pongo la mano en el fuego porque pasaremos" dan buena fe de ello. Creer o no creer, ésa es la cuestión... La esperanza es lo último que se pierde y partiendo de esa premisa -y de un Camp Nou lleno empujando al equipo-, parece fácil vislumbrar una remontada. De todas formas, y sin querer parecer pesimista, los últimos acontecimientos no lo dejan tan claro. Los malos resultados contra Milán y Real Madrid tan seguidos, hacen que el ya de por sí negativo aficionado culé sólo vea sombras negras. Metiéndonos en temas deportivos, intuyo que el Barça jugará con 3-4-3. Mientras que el Milán jugará con 4 atrás, 5 en medio y 1 arriba. El dibujo táctico que creo dispondrá el Barça, me hace pensar que habrá goles a favor. Pero también los últimos resultados y el esquema son muy propenso a que equipos como el italiano, que van a la contra como puñales envenenados, puedan meter algún tanto. Abrir a las bandas, tocar rápido y muchísima movilidad es lo que necesitará el equipo culé para batir a los italianos. Sin olvidar esa pizca de suerte que todo campeón necesita.
Así, entonces, si pensamos que el Milán meterá un gol, el Barça debería asumir como mínimo cuatro. Con lo cual, espero a un inspirado Messi, que, acompañado por los mejores jugadores del mundo -no lo olvidemos- como Xavi, Iniesta, Busquets, Pedro y, muy probablemente, Villa, podrán hacer posible el acceso a cuartos. El juague como mínimo asegura tiros a puerta y, casi con total seguridad, algún tanto.
Creer o no creer, ésa es la cuestión... Yo creo ¿y tú?