Esa barrita de color verde que aparece en la barra de Google trae de cabeza a la mayoría de editores y webmasters.
A unos importa más que a otros pero todos coinciden en su relevancia a la hora de posicionar una web en los buscadores. Y sobre todo en el buscador de buscadores, es decir en Google.
Este endemoniado algoritmo fue patentado en 1998 por Larry Page y casi desde entonces ha sido la pesadilla de los editores web que ven en él la solución a todos sus problemas. Nada más lejos de la realidad.
Desde luego el pagerank en sí no decide si vas a salir antes que otras páginas en los resultados de Google o de otros buscadores. Influye, pero en ningún modo es decisivo. La posición de tu página en los buscadores dependerá de otros muchos factores que deberá trabajar tanto o más que tu pagerank.
De hecho obtener un pagerank de entre 3 y 5 no es demasiado difícil. Basta con conseguir algunos enlaces de entre 3 y 5, enlazar directamente con Google y no incurrir en ningún tipo de práctica que el propio google pueda considerar ilícita (spam, enlaces ocultos, redirecciones, etc).
En cualquier caso, el mejor modo de aumentar el pagerank de tu web es sin duda la inclusión de enlaces relevantes. En este sentido debes tener en cuenta que a Google no le interesa mucho que tengas mil intercambios de enlaces. Lo que sí tiene mucho valor para Google es un enlace a tu página desde una web relacionada con la tuya en cuanto a contenidos y que contenga palabras claves parecidas a las tuyas.
Con esto debería ser suficiente para olvidarte del pagerank y centrarte en aspectos más importantes para el posicionamiento de tu web.
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