Todos sabemos que las palabras que utilizamos habitualmente nos delatan.
Ahora un profesor estadounidense se ha puesto manos a la obra y ha realizado un estudio con curiosos resultados. Según él, las personas que mienten no suelen utilizar el pronombre “yo”. Podemos descubrir a un mentiroso en un 70% si nos fijamos en este pequeño detalle.
Parece ser que las preposiciones, pronombres y artículos que utilizamos para expresarnos son fundamentales para detectar actitudes de las personas que nos rodean.
Antes hacíamos referencia a personas que no utilizaban el pronombre “yo”, sin embargo los que suelen utilizar este pronombre con asiduidad son personas tendentes a la depresión. Escribir las palabras “yo”, “mío”, “me” y “a mí” duplica la posibilidad de estar frente a personas excesivamente sensibles, y por lo tanto, fácilmente impresionables.
En pareja la situación es distinta, si se utiliza en las conversaciones las palabras “yo” y “nosotros”, la pareja tiene mayor capacidad para resolver asperezas que si se utiliza el pronombre “tu”. La realidad es que el poder de las palabras nos influye más de lo que podamos imaginar. Ahora es cuestión de que experimentemos con un amigo o familiar y veamos si estas teorías de este profesor de la universidad de Texas también se pueden aplicar en nuestro entorno.