Las personas mayores suelen tener no pocos problemas a la hora de llevar adelante una vida plena. El paso del tiempo deteriora la capacidad motora, articular, digestiva y en general todos los sentidos se van alejando del funcionamiento óptimo propio de los años de juventud.
Los masajes reflexológicos permiten mejorar las funciones afectadas por la edad, ya que por ejemplo, al aplicar una suave presión sobre los puntos energéticos del sistema urinario y genital, el anciano logrará mejorar la eliminación de toxinas. Un delicado masaje sobre los puntos correspondientes al sistema respiratorio pueden optimizar la capacidad respiratoria, además de proporcionar un nivel de relajación y alivio de los músculos y los huesos del paciente.
Siempre contando con la recomendación del gerontólogo o el médico de cabecera, la terapia reflexológica resulta un gran estímulo para mejorar la calidad de vida de los abuelos, a través de un tratamiento natural y no invasivo, que le ahorra cualquier efecto secundario si es aplicado en forma suave por un especialista. La reflexología es cada vez más recomendada incluso en pacientes con parkinson, permitiendo aliviar los síntomas de tan molesta enfermedad a través de relajantes sesiones de masajes que dependen de las preferencias y el cuadro clínico de cada paciente.