En algunas ocasiones, puede ser necesario mantener a salvo de los amigos de lo ajeno diferentes artículos o documentos, a los cuales sólo nosotros debemos tener acceso dentro del hogar, la oficina o comercio. Estos bienes materiales, deben ser guardados en un lugar seguro y qué mejor lugar que una caja fuerte ya sea escondida, bajo el escritorio, el closet, el piso o dentro de cualquier habitación de nuestra casa, oficina o comercio.
Existen diferentes tipos de cajas fuertes, dependiendo de su ubicación, hacia donde van destinadas y el nivel de seguridad que contienen las mismas. Todas ellas están fabricadas con un metal extremadamente pesado y duro y constan de un sistema de seguridad por el que sólo mediante una clave secreta abrirá dicha caja fuerte.Dependiendo de su tamaño y de su ubicación, tenemos cajas fuertes de empotrar, de sobreponer o de armario. Las de empotrar están orientadas a, como su nombre bien indica, a empotrarlas en alguna pared y dejarlas selladas y ocultarlas con algún cuadro encima, por ejemplo (como en las películas). Las cajas de sobreponer son de un tamaño más reducido y que se suelen utilizar para introducirlas dentro de algún mueble (como las de los hoteles). Y las de armario, son de un tamaño mayor y están pensadas para introducirlas en los armarios.El sistema de apertura de cada una de ellas, actualmente es mecánico y se basa en la introducción de una serie de números que abrirán la puerta. Si poseemos documentos importantes y valiosas joyas nada es más recomendable que el uso de las cajas fuertes las cuales nos brindan una buena seguridad.
Podemos encontrar en la web infinidad de tiendas de cajas fuertes, son de gran ayuda para examinar los modelos, precios y caracteristicas.
En los tiempos que corren es mejor estar prevenido y quizá no confiar tanto en los bancos.
