A la hora de servirte una copa de vino, ¿piensas o escoges por alguna razón la copa en donde te lo vas a servir? Por si no lo sabías, las diferencias que tienen las copas de vino son relevantes según el vino que vayas a tomar. Lo más importante es fijarse en la forma, el tamaño y el grosor del vidrio. La copa tiene tres partes esenciales la base, el tallo y el cuerpo o copa. La forma de la copa influye en la oxigenación, aroma y temperatura de los vinos. Por lo general el tinto se toma en copas con forma de globo. El tamaño es importante para mantener los aromas del vino, es por eso que nunca debes llenar una copa sino servirlo hasta donde termina la parte más ancha del cuerpo de la copa. Y por último, entre más delgada sea la copa, podrás tomar el vino y al mismo tiempo disfrutar de sus aromas, mientras que en una copa más gruesa, el vidrio no te permite oler las esencias del vino ni apreciar la apariencia de él.
Es muy importante saber este tipo de datos e información ya que de esta manera puedes aprovechar y disfrutar al máximo el vino.
