Un periodista que trabaja para Microsoft ha escrito un artículo sobre las comidas con más grasas, con más sal, azúcar y más calorías que se pueden encontrar, y algunas de las comidas sorprenderán incluso a los más grandes fans de la comida basura.
Entre las comidas que más ayudan a la obesidad está la “poutine”, una delicatesen francesa que está formada por patatas fritas, capas con lonchas de queso y salsa. Como media, una porción para una persona tiene 1,300 calorías, y considerando que la cantidad diaria recomendada es 2500 para hombres y 2000 para mujeres, después de esta comida no queda mucho espacio para la cena.
En Sudamérica, alguna gente cocina Turducken, que se trata de un pato enrollado dentro de un pavo con trozos de cerdo. Una porción normal puede llegar a tener 3,500 calorías. Otro plato típico es el Texan King, un bistec que pesa 2 kilos y es tan brutal que sus inventores lo ofrecen gratuitamente a cualquiera que consiga comérselo en menos de una hora. Si es un fan de la comida China, el pollo al limón le puede tentar pero tenga en cuenta que si está intentando perder peso, el plato contiene una media de 1,800 calorías.
Las comidas como estas contribuyen a fomentar la obesidad como una epidemia. Por ejemplo, en América, un cuarto de la población es obesa. El amor por sus habitantes por la comida basura hace difícil que se pongan a dieta ya que disponen de tentaciones poco saludables por todas partes. Cuando la pérdida de peso se hace cuesta arriba suele ser necesario echar mano de tratamientos como Xenical, que ayudan a perder la mayor parte del peso corporal siguiendo una dieta sana y haciendo algo de ejercicio.
Xenical es un medicamento que lleva años ayudando a perder peso y que es completamente seguro para la persona que lo toma.