Los mensajes positivos son más necesarios que nunca

En este mundo aparentemente caótico y en estos momentos en los que todos parecen dejarse arrastrar por la confusión, quizá sean más necesarios que nunca los mensajes positivos, las palabras y los hechos llenos de optimismo y esperanza, de cariño y de dulzura. En medio de las rudas noticias que invaden los telediarios, de las cifras negativas y del sensacionalismo que nos acosa todos los días, tímidamente (o quizá no), se abren camino poco a poco personas sencillas pero fuertes que se erigen en faros de luz, en estrellas que iluminan caminos, en abrazadores de almas. Son muchos más de lo que puedas imaginar y te lo aseguro porque yo los conozco a ellos, a ellas... Y están en todos los lugares, escuchando, sosteniendo, meditando, acariciando con mensajes de aliento y con pequeños detalles. Quizá tú también conozcas alguna de estas luces que brillan en medio de la oscuridad. Tal vez hayas escuchado o leído sus mensajes discretos pero elocuentes. Puede que te hayas emocionado con alguna de sus miradas. ¿O quizá también tú seas uno de ellos? ¿Te has parado a pensarlo? Tal vez tú seas una de esas personas que iluminan los días grises en el trabajo, en la calle... en cualquier lugar insospechado. Trata de prestar atención en todo momento a los mensajes que lanzas a la vida, con tus palabras, con tus pequeños gestos, y si te apetece únete a este mar creciente, bailando con sus bellas olas que limpian y sanan toda la Tierra.