Es sabido por todos que soñar es un mundo mágico donde todo es posible. La imaginación aquí no tiene límites, podemos soñar casi cualquier cosa.
Todas las personas no soñamos con la misma frecuencia e intensidad; a algunas les cuesta más que a otras. Pero ¿qué es soñar?, bueno está claro que todos sabemos lo que es, pero si tuviéramos que definirlo en una frase podríamos decir que soñar es cuando nuestra mente imagina ciertas cosas mientras dormimos y tenemos la sensación de que nos parece muy reales. Estarás conmigo que hay sueños que parece muchos más reales que otros; y algunos ni siquiera los conseguimos recordar.
Aquí entra una parte de la población que les cuesta bastante tener sueños con frecuencia. Algunos científicos además dicen que no soñar es malo para la salud. Desde el punto de vista del soñador, lo cierto es que es algo espectacular el poder soñar cada día y que cada sueño se convierta en un viaje hacia mundos desconocidos. A mucha gente le parece algo fascinante.
Con los cientos de sueños distintos que se pueden tener, podríamos tener sueños con inundaciones, con estar atrapados en un ascensor, soñar que puedes volar, soñar que eres un gato y miles de sueños más. Lo cierto es que cada sueño tiene un significado en concreto y que está relacionado íntimamente con tu lado emocional, ¿no lo sabías?, pues mira: Sigmund Freud fue el primero en darse cuenta y crear el psicoanálisis de los sueños. Él creía que los sueños tenían un significado mucho más profundo y que como dijimos antes va relacionado con la personalidad de la persona que sueña.
Ahora, ¿sabías por qué soñamos? Bueno está comprobado (sobre los años 50) que cuando estamos en un sueño muy profundo, aumenta nuestra actividad cerebral, así como los latidos del corazón y sobre todo pasamos la etapa REM (temblor de ojos con los párdados cerrados). Es en este punto donde hay más probabilidades de soñar según los expertos; y además si te despiertas y te encontrabas en este punto, tienes más posibilidades de acordarte del sueño más fácilmente. En esta fase REM, nuestro adn se repara y nuestro cuerpo descansa; viéndolo así encontrar una respuesta a la de ¿por qué soñamos? sigue siendo una pregunta difícil de responder hoy en día.
