La idea de hacer un viaje a un destino, de hacer turismo en él es que lo podamos conocer y poder llevarnos un lindo recuerdo de éste.
Definitivamente ésto es posible si aprovechamos más el tiempo sabiendo exactamente a donde ir y que conocer, nos arriesgamos menos a las posibles estafas por ejemplo en el cambio de dinero y entendemos mejor las leyes del país a visitar. Todo esto es posible si contratamos a un guía privado y mejor si es en nuestra propia lengua.
Un guía es una persona certificada (importante solicitar documento que lo acredite para que el guía en sí no sea una estafa) que conoce el lugar que esta mostrando, que sabe cual es el camino más corto y provechoso para realizar la visita, que nos recomienda lugares de confianza para comer, comprar, asistir a las actividades típicas del lugar y ante todo que haga de nuestra visita una linda experiencia.
Contras
Los contras de adquirir el servicio de un guía es que éste no esté certificado, lo que significa que no ha estudiado para ello y posiblemente repita lo que escucho en una excursión igual.... de ahí la importancia de solicitar el documento que lo acredite. Otra posible desventaja es que nuestro guía se dedique solamente a recomendar lugares de consumo dejando atrás el motivo por el cual lo contratamos: mostrarnos la ciudad de una forma amena pero ante todo honesta.
Así que definitivamente considere la posibilidad de conocer su próximo destino de la mano de un buen guía, que hable su idioma, en lo posible, de forma nativa, que esté acreditado para ello y ante todo que lo haga sentir que el destino visitado ha sido la mejor elección que ha tomado y que ha sido una experiencia inolvidable.