En México existe el tren al igual que en otros países del mundo pero no se utiliza para los mismos fines. Mientras que en la mayoría de ellos traslada lo mismo personas que mercancías y correspondencia, en México solo se utiliza para mover cargas y además, como medio de transporte para turistas en paseos dirigidos.
Nuestro objetivo: visitar el poblado Santiago de Tequila en Jalisco para conocer el lugar y el proceso de elaboración de su bebida, reconocida mundialmente.
Santiago de Tequila fue fundado el 15 de abril de 1530 por franciscanos bajo las órdenes de fray Juan Calero, trayendo para ello a indígenas del cerro del Chiquihuitill o Tierra de agaves. El nombre de Tequila proviene de la palabra náhuatl Tecuilan o Tequillan, que quiere decir lugar de tributos. Es un "pueblo mágico".
En 1600, Pedro Sánchez de Tagle crea la primera destilería de bebida de agave, el cual ya se consumía anteriormente pero sin destilar, creando con ello la primera fábrica de Tequila propiamente dicha.
Las principales marcas de tequila actualmente son: Tequila José Cuervo, Tequila Don Julio, Cabrito, Cazadores, Herradura, Orendain y Tequila Sauza entre otros..
El lugar de salida es como una terminal de ómnibus con mucha gente y mariachis tocando para amenizar el viaje. El recorrido se hace en un tren antiguo con locomotora y muchos vagones que corre por vigas de tren en las calles a la par de los autos. Al entrar al tren se observa que está muy limpio y bien cuidado, con un joven guía turístico que cuenta la historia del tequila durante un viaje lento que permite disfrutar del paisaje mientras los pasajeros beben todo lo que quieren, esto último, tanto a la ida, como al regreso.
Al llegar se visitan varios lugares que corresponden con los pasos que lleva el proceso del tequila complementados con detalladas explicaciones. Todos los de la excursión caminan con un vaso de tequila para arriba y para abajo, y cuando se acaba, sirven mas si uno no se opone, durante todo el tiempo que dure el paseo.
En México beber mucho tequila ha sido siempre símbolo de hombría y dominio.
Casi al concluir el recorrido, se pasa a un restaurant al aire libre con mesas dónde se puede pedir típica comida mexicana para recuperar las energías que se han perdido tomando, pues muchos llegan aquí ya bien borrachos…
Es el momento de aprovechar y comprar un recuerdo de este viaje: la compra de una botella de tequila del bueno, para llevar a casa como un gran trofeo…
Tomar tequila conlleva una ceremonia: En primer lugar, se usa un vasito pequeño llamado “caballito” lleno hasta el tope y que uno debe tomarse en un solo trago y sin respirar. En segundo lugar se agarra el caballito, se alza y, con la mano hacia delante se dice al tiempo que se mueve el vaso en cada sentido: arriba, abajo, al centro y para adentro… y ahí te das el gran y largo trago, que pasa bien, pero que deja la garganta echando chispas!!!!!!!!!
La experiencia es muy rica no solo por el paseo sino por tener la oportunidad de conocer de cerca todo el proceso de fabricación de la bebida insignia de México.
