El tipo de respuesta orgásmica varía notablemente en cada mujer, e incluso en una misma mujer según las circunstancias. Se considera que la anorgasmia, o inhibición recurrente y persistente del desarrollo del orgasmo, es una verdadera disfunción cuando provoca insatisfacción en la mujer.
Lo que hay que saber:
• Se denomina anorgasmia a la disfunción sexual femenina caracterizada por una inhibición recurrente y persistente del desencadenamiento del orgasmo, que se manifiesta por un notorio retraso o por la ausencia total del mismo después de una fase de excitación normal y siempre y cuando se lleve una actividad sexual adecuada.
• Esta disfunción sexual se conoce popularmente como “frigidez”, pero debe evitarse tal denominación porque es equívoca: sugiere que la mujer es fría en materia sexual, cuando lo cierto es que puede tener un alto grado de impulso sexual a pesar de la ausencia de orgasmos.
• Hay mujeres quienes la ausencia de orgasmos no les angustia, por motivos personales, por lo que la anorgasmia solamente se considera una verdadera disfunción cuando provoca insatisfacción.
• El orgasmo corresponde al fenómeno que aparece en el clímax sexual, en la tercera fase de la respuesta sexual: diversos músculos pelvianos se contraen rítmicamente, mientras se experimenta una intensa sensación de placer. Siempre se trata de la misma respuesta, independientemente del estímulo requerido para desencadenarlo o de la práctica sexual que lo provoque.
• La mayor parte de las veces la anorgasmia es de origen psicológico, y depende de factores intra psíquicos derivados de una educación rígida en materia de sexualidad. La terapia sexual puede ser útil en estos casos, favoreciendo mediante la psicoterapia y la realización de ejercicios sexuales para que la mujer aprenda a relajarse y solventar los conflictos que causan la disfunción.
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