Formatear un texto o celda en Excel implica cambiar el tamaño, tipo de letra, color, negrita, subrayado, y otras características del texto. En el caso del formato condicional, esto significa cambiar las propiedades del texto en el caso de que se cumplan determinadas condiciones.
Para entender el formato condicional, imagina un temporizador electrónico de cocina. Cuando el tiempo llega, a cero, por lo general suena un pitido audible, una campana, se ve algún destello o algo similar. Podemos aplicar este mismo tipo de comportamiento a los formatos de una o más celdas. Por ejemplo, si una celda contiene un valor menor de 100, podemos mostrar este valor de color rojo. Del mismo modo, si una celda tiene un valor superior a 1.000, podemos cambiar el color de fondo de la celda a verde.
Aplicar los formatos condicionales de Excel es muy útil cuando deseamos analizar una lista de valores y percibimos que valores mayores o menores que ciertas cantidades podrían ser perjudiciales para nuestro negocio.
En Excel, podemos cambiar fácilmente las siguientes propiedades de las celdas.
• El tipo de fuente.
• Si la fuente es negrita, cursiva, o ambos.
• El tamaño de la fuente.
• Si la fuente tiene un subrayado simple o doble.
• Si la fuente se ha tachado, es superíndice o subíndice.
• El color de la fuente.
• Cambiar el grosor de los bordes de la celda.
• Cambiar el espesor de los bordes de la celda.
• El color del borde.
• El color de sombreado de la celda.
Para aplicar el formato condicional a una o más celdas, selecciona las celdas a las que deseas dar formato. Luego en el menú Formato, haz clic en Formato condicional. Introduce las propiedades del formato condicional en Condición 1. Si deseas añadir más opciones de formato, haz clic en el botón Agregar e introduce otro criterio.
En versiones anteriores a Excel 2007, sólo se pueden crear tres condiciones simultáneas. En la versión 2007, podemos crear ilimitados criterios.
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