El verano ya se está acabando, dejando el lugar para el otoño y para el comienzo de las escuelas, de las clases de las universidades, para que la gente vuelva al trabajo, en pocas palabras, para que todos vuelvan a lo cotidiano.
Para los más jovencitos, septiembre representa el mes en el que la escuela comienza, razón de alegría en general. No es que las vacaciones no les gusten, pero los niños se aburren rápido y sienten la necesidad de estar con otra gente de la misma edad como son los compañeros. Para los padres, el comienzo de la escuela representa, aparte de la tranquilidad que los hijos van a estar en la escuela y van a tener una ocupación, unos costes suplementarios para preparar a los pequeños para el nuevo año escolar.
Si la mochila del año pasado puede ser utilizada también este año, aunque la mayoría de los niños van a insistir que ya no sirve, comprar los cartuchos de tinta para la impresora, los cuadernos, lápices y bolígrafos, libros y cuadernos de trabajo, todos estos productos se han de comprar.
Además de los materiales didácticos, los niños necesitan ropa nueva para empezar bien la escuela. Bien si les hay que comprar algún tipo de uniforme que es obligatorio llevar o simplemente queremos ofrecerles una alegría, la ropa también se compra en este periodo del año. ¿Al final, todo para que el niño se sienta bien y vaya con placer a la escuela, no?
Como ya no falta mucho, si no habíamos hecho ya las compras, seria tiempo de ir a buscar todo lo necesario para el comienzo de las clases.