Si padece de los calores de la menopausia y tiene miedo de tomar hormonas, los suplementos de soya podrían ayudarle. Los fabricantes que venden sus productos en tiendas naturistas aseguran que está comprobado clínicamente que la soya ayuda a eliminar los calores y promover el bienestar. Además, en las etiquetas y anuncios se habla de otros beneficios.
Pero los investigadores que trabajan en esta área dicen que las promesas no están verificadas científicamente; algunos han especulado que unos compuestos de la soya parecidos a los estrógenos --conocidos como isoflavonoides-- podrían ayudar a disminuir el riesgo de enfermedades del corazón en las mujeres durante la época de la menopausia.
La asociación entre estos compuestos de la soya y el retraso en la erosión de los minerales (en los huesos) es débil y lo es aún más la asociación entre el uso de estas sustancias como tratamiento "natural" de los calores.
Varias investigaciones, incluyendo una reciente realizada en la Universidad Tufts, estudiaron a mujeres que padecían más de cinco "ataques de calor" en el transcurso del día e hicieron tomar a algunas una pastilla con el suplemento de isoflavonoides (o sea del compuesto de soya) y a otras un placebo. Después de varios meses, no hubo ninguna diferencia entre los dos grupos. Tanto las mujeres que tomaron el derivado de soya como las que tomaron el placebo presentaron mejoras en cuanto a los calores.
Desde luego que aún no tenemos una certeza total de que no podrían tener algún beneficio, y sin lugar a dudas muchas mujeres que tengan estos síntomas probarán suplementos de soya para ver si les ayudan.
Los investigadores no están en contra, pero sí recomiendan que se aseguren que los suplementos no tengan más de 50 a cien miligramos de isoflavonoides. Las pastillas que se venden con este fin fácilmente pueden exceder estas cantidades y no hay estudios que muestren si pueden causar problemas a largo plazo.
